jueves, 27 de marzo de 2025

En primavera la vida renace


Llega el florecer de los árboles, de las flores, vuelve a brotar la vida en la tierra, se disfrutan de más horas de luz, dejando atrás el recogimiento y el frío del invierno. Esta estación nos invita no solo a disfrutar de la naturaleza, sino también a cuidar de nuestro cuerpo. Es un buen momento para darle un respiro al sistema digestivo, especialmente para limpiar y revitalizar el hígado. 

La clave de una depuración hepática está en reducir nuestra carga tóxica. Liberar al organismo de excesos acumulados y toxinas es una manera de autosanarse.

La naturaleza, sabia como siempre, nos regala en primavera una abundancia de alimentos frescos, llenos de vida, como hojas verdes, frutas, raíces y semillas. Estos alimentos no solo están en su punto óptimo, sino que también conservan toda su vitalidad, enzimas y nutrientes.

Prioriza la alimentación natural 

Los vegetales crudos o poco cocinados son pilares fundamentales en una dieta depurativa. Conservan intactos sus nutrientes esenciales y nos ayudan a sentirnos saciados. Además, poseen la fuerza vital que les ha dado la tierra. Sin embargo, si los vegetales crudos no te sientan bien, puedes optar por métodos ligeros como el vapor. Adereza con plantas frescas, hierbas aromáticas y un buen aceite de oliva en crudo para potenciar su efecto depurativo.

En estos días de limpieza, es importante dejar de lado hábitos poco saludables como el tabaco, el café, o el alcohol y retirar los ultraprocesados y azúcares refinados. Además de incluir ejercicio moderado adaptado a nuestras necesidades.  A cambio, podemos introducir ingredientes que apoyen al hígado en su proceso natural de desintoxicación.

Alimentos que cuidan tu hígado

-Kale: Rica en antioxidantes y clorofila, ideal para eliminar toxinas.

-Cítricos: Su vitamina C y flavonoides potencian la actividad hepática.

-Chucrut: Un fermentado lleno de probióticos, que favorece la salud intestinal y, por extensión, la función del hígado.

-Apio y nabo:  Estimulan el flujo de bilis, esencial para la desintoxicación.

-Espinacas: Altas en antioxidantes que protegen y regeneran el hígado.

-Frutos rojos: Como arándanos, frambuesas, moras, fresas, cerezas, madroños, grosellas, llenos de antocianinas y antioxidantes que combaten el daño oxidativo.

-Aguacate y germinados: Ayudan a la producción de glutatión, un antioxidante clave para la salud hepática.

-Remolacha: Su betaína reduce la acumulación de grasa en el hígado.

-Piña, cúrcuma y jengibre: Aliados antiinflamatorios que optimizan su función

-Coliflor: Rica en compuestos azufrados que activan enzimas detoxificantes.

Una llamada a cuidarnos

La primavera no es solo una estación de renovación para la naturaleza, sino también para nosotros mismos. Aprovecha este momento para nutrir tu cuerpo con alimentos llenos de vida y darle al hígado el descanso que se merece.  Un estilo de vida más consciente comienza con pequeños cambios, que, poco a poco, transformarán tu bienestar.

Si quieres aprender más sobre cómo incorporar estos alimentos en tu día a día, te invito a participar en mis talleres de cocina saludable, antiinflamatoria, y sin gluten. Descubre recetas deliciosas, fáciles de preparar y diseñadas para cuidar tu cuerpo mientras disfrutas del proceso. Te invito a formar parte de nuestra comunidad Alimentació Conscient. Nos reunimos una vez al mes. Contacta conmigo para descubrir todo lo que voy preparando: talleres, recetas, consejos...

Y me despido con esta cita: "Lo único que sé con certeza es que lo que das vuelve a ti".


 

sábado, 11 de enero de 2025

 Hábitos antiinflamatorios: Comienza el año con bienestar

Cada inicio de año, las redes sociales se inundan de listas de buenos propósitos para empezar con buen pie. Pero, ¿Qué tal si este año te enfocas en algo que realmente puede transformar tu salud y felicidad? Te propongo una lista de hábitos antiinflamatorios que, aunque no sientas inflamación, te ayudarán a sentirte  más sano y feliz. 

No necesitas adoptar todos estos hábitos de golpe. Elige uno que te llame la atención o que creas que más te beneficiará.  Recuerda,  los pequeños pasos constantes en tu día a día se convierten en grandes logros. ¡Así que empezamos!


  • Movimiento

  • Ayuno 

  • Hidratación

  • Alimentación antiinflamatoria

  • Microbiota saludable

  • No alcohol y no tabaco

  • Vitamina D y Grownding (poner los pies en la tierra)

  • Baño con sales de magnesio

  • Gestión del estrés

  • Sueño de calidad

  • Contacto con la naturaleza

  • Mantener una postura adecuada


Movimiento: El ejercicio regular es fundamental para mantener una buena salud y reducir la inflamación. Actividades como caminar, nadar, practicar yoga o hacer ejercicio de fuerza ayudan a mejorar la circulación, fortalecer el sistema inmunológico y reducir los marcadores inflamatorios en el cuerpo.

Intenta moverte al menos 30 minutos al día y encuentra el ejercicio que mejor se adapte a lo que necesitas.



Ayuno: El ayuno intermitente puede ayudar a reducir la inflamación y mejorar la salud metabólica. Por ejemplo, puedes empezar por 14-16 horas de reposo o descanso sin comer para empezar a notar sus beneficios. 


Hidratación: Mantenerse bien hidratado es esencial para la salud general y para reducir la inflamación. El agua ayuda a eliminar toxinas del cuerpo y a mantener las funciones celulares óptimas. 


Alimentación Antiinflamatoria: Se trata de comer alimentos reales no productos procesados. Prioriza aquellos alimentos con propiedades antiinflamatorias como las frutas, verduras, pseudocereales, proteínas de calidad, grasas saludables y especias antiinflamatorias, que son ricos en nutrientes esenciales y antioxidantes. Evita los productos ultraprocesados y los azúcares. Si todavía no formas parte del grupo alimentación consciente, solo has de decírmelo. Nos reunimos una vez al mes, cocinamos y aprendemos unos de otros.


Microbiota Saludable: Mantener una microbiota intestinal saludable es crucial para reducir la inflamación. Consume alimentos ricos en probióticos, como el yogur, el kéfir, el chucrut. También es importante incluir prebióticos en tu dieta, como la fibra de frutas, verduras y granos enteros, que alimentan a las bacterias beneficiosas del intestino.


No alcohol y No tabaco: El consumo de alcohol y tabaco pueden aumentar la inflamación en el cuerpo. Reducir o eliminar estos hábitos puede tener un impacto significativo en tu salud general y en la reducción de la inflamación. Busca apoyo si necesitas ayuda para dejar de fumar o dejar de consumir alcohol.


Vitamina D: La vitamina D juega un papel importante en la regulación del sistema inmunológico y en la reducción de la inflamación. Puedes obtener vitamina D a través de la exposición al sol, alimentos como el pescado graso y los huevos, o suplementos. Consulta con un profesional de la salud para determinar si necesitas un suplemento de vitamina D.


Grounding: El grounding, o contacto con la tierra, implica caminar descalzo sobre superficies naturales como la hierba, la arena o la tierra. Se cree que este contacto directo con la tierra puede ayudar a reducir la inflamación, mejorar el sueño, y aumentar el bienestar general. Intenta pasar tiempo al aire libre y en contacto con la naturaleza siempre que sea posible.


Baño con Sales de Magnesio: Los  baños con sales de magnesio pueden ayudar a reducir la inflamación y aliviar el dolor muscular. El magnesio es un mineral esencial que juega un papel en muchas funciones corporales, incluyendo la relajación muscular y la reducción del estrés. Añade una taza de sales de Epson en tu baño y relájate durante 20-30 minutos. 


Gestión del estrés: El estrés crónico puede aumentar la inflamación en el cuerpo. Practicar técnicas de relajación como la meditación, la respiración profunda o el yoga puede ayudar a reducir el estrés y la inflamación.


Sueño de Calidad: Dormir bien es esencial para la salud general y para reducir la inflamación. Intenta mantener una rutina de sueño regular y asegúrate de dormir entre 7 y 9 horas cada noche.


Contacto con la naturaleza: Pasar tiempo al aire libre y en contacto con la naturaleza puede ayudar a reducir la inflamación y mejorar el bienestar general. Intenta pasar tiempo en parques, bosques o cerca de agua siempre que sea posible.


Mantener una postura adecuada: Evitar malas posturas y realizar ejercicios de estiramiento puede prevenir la inflamación relacionada con el estrés.


Te animo a que elijas uno de estos hábitos y lo integres en tu vida. Observa cómo te sientes. La clave está en la constancia. Cada pequeño paso que tomes cuenta y, con el tiempo, estos hábitos se convertirán en una parte natural de tu rutina diaria.


Como dijo Mahatma Gandhi: “Sé el cambio que quieres ver en el mundo”. Empieza por ti mismo y verás cómo todo a tu alrededor también mejora.


Para más información y recursos sobre hábitos antiinflamatorios, puedes contactar conmigo para ver lo que más se adapta a tus necesidades. Si conoces a alguien a quien esta información puede ayudarle, compártela. Todo lo bueno que nos llega a nuestra vida, hay que compartirlo.

Gracias por leerme.




viernes, 29 de noviembre de 2024

 ¿Qué pasa con el gluten?


El gluten es una proteína que se encuentra en cereales como el trigo, la cebada, el centeno y sus híbridos.

Esta proteína aporta viscoelasticidad a las masas hidratadas con harinas de estos cereales y permite elaborar productos como el pan. 

El gluten es uno de los alérgenos más importantes, causando dos tipos de intolerancias: la celiaquía y la sensibilidad al gluten no celíaca (SGNC).

La normativa europea obliga a destacarlo con letra diferente en la lista de ingredientes para que los consumidores puedan identificarlo rápidamente.

Se considera que entre un 1-2% de la población padece celiaquía y un porcentaje desconocido padece SGNC. 

Además, algunas personas pueden tener alergias e intolerancias a otros componentes de estos cereales.

Los expertos más reconocidos en el ámbito internacional sobre el gluten y su impacto en la salud dicen que no debemos retirarlo si no tenemos una intolerancia.

El cultivo de cereales ha cambiado mucho, especialmente durante el último siglo, con el uso de pesticidas para asegurar las cosechas.

En Europa y otras partes del mundo, hay límites máximos permitidos de residuos de pesticidas en los alimentos, siendo más altos en los cereales.

El pan moderno, nada tiene que ver con el que comían nuestros abuelos.  Se elabora principalmente con trigo moderno, harinas refinadas, almidones, restos de pesticidas, fermentaciones rápidas, levaduras rápidas y aditivos. Estos factores tienen un papel determinante en el incremento de celiaquías, intolerancias y otras enfermedades autoinmunes o inflamatorias.

El pan moderno contiene proteínas del trigo, como las aglutininas (WGA), que estimulan la síntesis de citoquinas proinflamatorias. !Y si solo fuera eso!...

El trigo moderno, conocido como trigo hexaploide (Triticum aestivum), tiene un genoma compuesto por 42 cromosomas. Esto significa que tiene seis conjuntos de cromosomas (hexaploide), en comparación con los dos conjuntos (diploide) que tienen muchas otras plantas. Esta complejidad genética le permite producir una gran cantidad de proteínas distintas, aproximadamente 23.788 proteínas. (1)

La mayor cantidad de cromosomas en el trigo moderno implica que tiene más información genética, lo que resulta en una mayor diversidad de proteínas. Esto puede influir en varias características del trigo, como su resistencia a enfermedades, su adaptabilidad a diferentes condiciones ambientales y su contenido nutricional. Sin embargo, también significa que el trigo moderno tiene más gluten y otras proteínas que pueden ser problemáticas para algunas personas. (2)

En comparación, las variedades antiguas de trigo, como el trigo einkorn (Triticum monococcum), son diploides y tienen solo 14 cromosomas. Estas variedades contienen menos gluten y pueden ser más fáciles de digerir para algunas personas. (3)

Para personas con sistemas digestivos sensibles, se recomienda consumir pan de trigos antiguos, cereales sin gluten o pseudocereales. 

Y ahora, antes de acabar, me gustaría hablaros de la foto de mi amigo agricultor ecológico David Muncunill. La primera vez que vi esta foto, me sorprendió la impresionante altura del trigo, que supera los 1'75 metros. Es un espectáculo raro en la actualidad, ya que los campos de trigo modernos suelen tener plantas mucho más bajas. Hoy en día, el trigo se cultiva con variedades más cortas para facilitar la cosecha y resistir mejor a los vientos fuertes. Esta imagen, de hace algo más de 15 años, muestra un paisaje agrícola poco común, una época en la que los cultivos alcanzaban su altura natural.

Hacer pan casero puede ser una actividad adictiva y gratificante, así que ya lo sabes, ponte manos a la masa. 

Bibliografía: 

1. https://www.elmundo.es/ciencia-y-salud/ciencia/2018/08/16/5b75ab13468aeb3d7e8b458b.html

2. https://www.ias.csic.es/desarrollan-el-primer-mapa-genetico-de-las-secuencias-repetidas-de-adn-de-trigo/

3.https://www.csic.es/es/actualidad-del-csic/descifrado-el-genoma-del-trigo



martes, 24 de octubre de 2023

 BENEFICIOS DEL AYUNO INTERMITENTE


Hoy en día, debido a nuestro estilo de vida, sobrepasamos la capacidad que tiene nuestro cuerpo para depurarse. La ingesta de alimentos muy procesados, la sobrealimentación, el sedentarismo, la exposición a contaminantes como pesticidas, herbicidas, aditivos, etc., hacen que nuestros  mecanismos de limpieza  a través de los órganos depurativos como son el intestino (heces), el hígado, los riñones (orina), la piel (sudor)  y los pulmones (respiración), no sean suficientes para eliminar las toxinas acumuladas.

Más allá de ser una moda, el ayuno es una herramienta terapéutica muy potente. Es un proceso natural, que también realizan los animales. Esta práctica consigue que el organismo se limpie y funcione mejor. 

El primer beneficio es facilitar la eliminación de toxinas ácidas acumuladas. Es un proceso de limpieza, reciclaje y renovación celular, o lo que se denomina autofagia.

Cuando hacemos ayuno, dejamos de ingerir  alimentos y esto permite a las células, órganos digestivos y de absorción descansar y ahorrar energía. Ahora nuestro cuerpo se centrará en depurar las células dañadas, sustancias inflamatorias y que generan toxicidad en el organismo en vez de digerir alimentos.

Además, el ayuno también nos ayuda a reducir la inflamación en nuestro cuerpo. Según un estudio presentado en las Sesiones científicas 2021 de la Asociación Americana del corazón, el ayuno intermitente puede reducir la inflamación crónica de bajo grado que se produce en todo el cuerpo. Esta inflamación está relacionada con enfermedades crónicas como problemas cardiovasculares, metabólicas e incluso varios tipos de cáncer. 

La digestión estimula el sistema inmunitario. La comida no deja de ser algo extraño a nuestro cuerpo, y el organismo ha de identificarlo. Al no comer, dejamos que este sistema descanse y se potencian nuestras defensas.

La pérdida de peso y grasa visceral es quizás el beneficio  más conocido que ha llevado al ayuno a la fama, pues ayuda a consumir menos calorías y aumentar el índice metabólico. En realidad, cuando dejas de comer, no dejas de alimentarte porque lo haces a partir de las reservas de grasa almacenadas.

Además, el ayuno tiene otros beneficios, para la salud, como:

Reducción de los niveles de insulina: El ayuno puede ayudar a las personas con prediabetes y diabetes tipo 2.

Herramienta antienvejecimiento: El ayuno puede reducir el estrés oxidativo, que es causado por moléculas inestables llamadas radicales libres. Estos radicales libres reaccionan con otras moléculas como la proteína y el ADN,  y los dañan causando el desarrollo de enfermedades. 

Mejora la salud cerebral:  Facilita la producción de un factor de crecimiento del cerebro que ayuda a madurar neuronas de determinadas partes del cerebro y a generar mejores conexiones neuronales entre las células nerviosas. Esto nos da claridad mental, aumenta la creatividad y la inteligencia.

Fomenta la salud mitocondrial:  ayuda a aligerar o prevenir la mayoría de enfermedades inflamatorias y degenerativas crónicas.

Da una sensación de vitalidad y energía. También conseguimos favorecer una mejora de la salud intestinal, un pilar vital de nuestra salud. Mejora la calidad del sueño

Hay muchos tipos de ayuno. Debe durar un mínimo de 12 horas, lo que se considera un ayuno fisiológico.  El ayuno se debe individualizar y adaptarlo a cada persona, no vale hacerlo porque está de moda. Hay que tener en cuenta: el estado de salud física y emocional, los hábitos alimenticios y las adicciones (café, tabaco), las responsabilidades laborales y familiares. 

Mis recomendaciones: Intentar cenar lo más temprano posible, no más de las 20:00 h, y empezar dejando 12 horas entre la cena y el desayuno, Por ejemplo: cenar a las 19:00 y no desayunar hasta las 07:00. Cuanto más larga sea la franja de no ingerir comida, mayores beneficios se producen en el cuerpo. Puedes  ir alargando las horas hasta 16-18. 

Comenzar a practicar el ayuno cuando estés más tranquilo, no cuando estés sobrecargado de trabajo, puede ser beneficioso para ti.  Pueden ser buenos momentos para empezar, después de periodos de excesos, como pueden ser las vacaciones de verano, o en Navidad. 

El ayuno está contraindicado si hay extremada delgadez y otros trastornos alimentarios, como la anorexia. O personas muy ancianas con arteriosclerosis cerebral o insuficiencia renal o hepática. Tampoco embarazadas.

Espero que este artículo te haya sido útil  y te animes a practicar el ayuno como parte de tu rutina para sentirte mejor.

¡Te deseo salud!



martes, 25 de enero de 2022

BIENVENIDA A CUIDATE PARA VIVIR MEJOR


Todos, sin lugar a duda deseamos sentirnos bien y tener una vida más saludable. Si estas leyendo esto, ante todo quiero darte la bienvenida a "Cuídate para vivir mejor" y quiero felicitarte por tomar la decisión de dar el paso hacia una vida más saludable. Al comienzo de un nuevo año, estamos motivados y nos proponemos metas para alcanzarlo, pero debido al ajetreo diario nuestros buenos propósitos van quedando atrás y finalmente no los cumplimos. ¿Por qué sucede esto? ¿Cómo podemos evitarlo?

¿Sabías que... según dice la Organización Mundial de la Salud, el 73% de las muertes anuales en el mundo. tienen que ver con enfermedades no transmisibles, que están asociadas a los problemas que genera nuestro estilo de vida y alimentación?

Enfermedades crónicas como sobrepeso y obesidad, diabetes, enfermedades cardiovasculares, problemas inflamatorios.

Está claro que algo estamos haciendo mal. Tenemos que cambiar nuestros hábitos si queremos llevar una vida mejor. Es nuestra responsabilidad hacer el cambio. Muchas veces nos perdemos por el camino. Hay un exceso de información en materia de nutrición circulando por las redes sociales, y muchas veces hasta algunas contradictorias, así que es normal que tengamos dudas.

Entre estas metas u objetivos podemos hablar de cuatro pilares para alcanzar un estilo de vida saludable. Para mí, estos cuatro pilares son: la alimentación, las relaciones interpersonales, el movimiento y la gestión del estrés. Cuando tenemos pocas prioridades es más fácil poder sostenerlas en el tiempo. 

El primer pilar es llevar una buena alimentación basada en alimentos reales, los que encontramos en el mercado. frutería, pescadería, carnicería.... 

¿Sabes cual es uno de los errores más comunes de las personas que quieren empezar a comer bien? No saber identificar aquellas cosas que no nos sientan bien o son perjudiciales para nuestra salud. El primer paso para empezar a comer bien es, eliminar de nuestra dieta los alimentos que son malos para nuestra salud. 

¿Cómo es tu alimentación? ¿Eres un adicto al azúcar? El 80% del azúcar que consumimos está escondida en los productos ultraprocesados. Cargados de carbohidratos refinados, azúcar y grasas inflamatorias. Productos que, aunque muchas veces parezcan saludables, como los cereales para desayuno; galletas; zumos envasados; pan comercial; no lo son. 

Cuando te alimentas a partir de productos ultraprocesados y no de alimentos reales, nunca estas saciado porque no te nutres, siempre tienes hambre. 

Una alimentación basada en alimentos reales, rica en proteínas de buena calidad, fibra y grasas saludables hace que el hambre se acabe y genera saciedad. Así es casi imposible comer más de 3 veces al día. 

El segundo paso es hacer una lista de la compra básica para hacer un fondo de nevera y de despensa. Verduras y frutas de temporada. Pescado y carne. 

La lista de la compra ha de estar adaptada a nuestras necesidades. No pueden faltar en la lista: cereales integrales y legumbresfrutos secossemillas y fruta seca deshidratada sin azúcarEnvasados saludables (botes de legumbres, caldo de verduras, hummus, cereales sin azúcar, pescado en conserva de cristal y aceite de oliva, yogures, cacao puro). Proteínas animales de la mejor calidad: carne, huevos, pescado pequeño de temporada y moluscos. Proteínas vegetales (legumbres, cereales, frutos secos, algas, semillas, verduras, setas, tofu, tempeh) Aceite de oliva virgen extravinagre de manzana, salsas como la mostaza, tamari.

Espero que te haya sido útil y haberte ayudado, pero sobre todo piensa en tu comida como un acto de amor hacía ti misma, y a tu familia.

Salud


sábado, 2 de octubre de 2021

RECETA DE PAN SIN GLUTEN


PAN DE TRIGO SARRACENO Y QUINOA



Los productos sin gluten como panes, magdalenas, pizzas o pastas, que encontramos en el súper,  contienen ingredientes muy procesados: almidones, pectinas, gomas...etc. Estos son  muy pobres nutricionalmente, además de  aditivos para obtener la esponjosidad de los panes tradicionales. Por eso es mejor elaborar nuestro propio pan sin gluten en casa. Podemos preparar panes sin gluten caseros con legumbres, cereales y pseudocereales integrales, como avena sin gluten certificada, quinoa, amaranto, trigo sarraceno, teff, frutos secos y semillas como almendra, coco o semillas de calabaza y girasol.
Podemos preparar las harinas de estos cereales y semillas en casa, con una batidora de vaso potente.
Las harinas más usadas para hacer pan y que yo recomiendo tener en la despensa son: harina de arroz integral, de avena, sorgo, teff, y la harina de trigo sarraceno.

Los ingredientes esenciales para hacer pan sin gluten son:

-Harinas sin gluten (de arroz integral, de avena, de trigo sarraceno, de teff, de sorgo, de mijo, de quinoa, de maíz)
-Almidones ( polvo de arrurruz, almidón de maíz, de patata, mandioca) 
-Aglutinante ( Psyllium, Xanthana)
-Levadura de panadería seca suele venir en cepas deshidratadas dentro de un sobre. Es la forma más rápida de hacer panes. No requiere de ningún tipo de preparación previa y acorta el tiempo de fermentación. También se puede utilizar masa madre.
-Azúcar , yo le pongo de coco, contribuye a la coloración de los panes, y sirve para que la levadura actúe.
-Sal marina sin refinar es un excelente potenciador del sabor además de una fantástica fuente de minerales. 
-Agua


Algunos consejos que pueden ayudarte:

-No te desanimes si el primero que haces, no te sale, yo antes de conseguirlo he tirado unos cuantos.
-Para lograr esponjosidad, podemos utilizar Psyllium, la cascara de una planta llamada plantago ovata. Es pura fibra y un producto mucho más natural que la goma Xanthana.  El Psyllium mejora la textura y añade volumen y elasticidad. Por lo general, se suelen utilizar 20 gramos de Psyllium por cada 500 gramos de harina.
-Ya que nos ponemos manos a la obra, o mejor dicho, manos a la masa, podemos hacer más cantidad y congelarlo. Dejar enfriar, cortarlo en rodajas y congelarlo.
-Cuando descubrí el polvo de arrurruz, fue un antes y un después, este actúa como almidón creando aire en las masas haciendo que el pan sea blandito y esponjoso, eso sí no es como el pan de trigo. 


Aquí tienes mi receta de pan sin gluten:

PAN DE TRIGO SARRACENO Y QUINOA

Ingredientes:

150 gramos de trigo sarraceno
 50 gramos de harina de quinoa
 15 gramos de semillas de sésamo
 10 gramos de semillas de chía
    2 cucharadas soperas de psyllium
    2 cucharadas soperas de arrurruz
    6 gramos de levadura de panadería seca
    1 cucharadita de azúcar de coco 
    6 gramos de sal marina sin refinar
    2 cucharadas soperas de aceite oliva virgen extra
300 ml de agua

Elaboración: 
Puedes hacer la mezcla  y usar  una panificadora.

En caso de utilizar el horno estos son los pasos:
-Mezcla todos los ingredientes secos (harinas, semillas, psyllium, arrurruz, levadura, azúcar de coco, sal)
-Añade poco a poco el agua tibia a unos 37 ºC aproximadamente y finalmente el aceite y amasa hasta conseguir una mezcla homogénea.
-Deposita en un molde para hornear recubierto de papel vegetal untado con un poco de aceite, y déjalo reposar 30 minutos.
-Hornea aproximadamente 1 hora 15 minutos a 180 ºC

Espero que te sea útil.
Estaré encantada de saber tu experiencia elaborando el pan.








jueves, 13 de mayo de 2021

Moltes gràcies pel vostre treball



MOLTES GRÀCIES PEL VOSTRE TREBALL!!  

En temps de crisi, amb manca de recursos, no heu perdut la vocació i ho esteu donant tot, per cuidar-nos. 

Sou herois molt valents, fent actes extraordinaris i moltes vegades desesperats. 

Esteu esgotats, de vegades sense dormir, sense material necessari, enmig del caos, en un entorn de sofriment, veient a persones que se'n van. 

Sabeu que heu fet les coses, el millor que heu pogut.

L'aplaudiment de les 8, mai serà suficient. 

Segur que us encantaria estar a casa amb la vostra família, però preferiu fer la vida dels altres més agradable. 

Això és ser bona persona, amb qualitat humana. 

Això és tenir una vida útil, d'èxit. 

Gràcies per l’altruisme que demostreu, pel vostre amor a la gent. 

Gràcies per la vostra paciència, tolerància i flexibilitat. 

Gràcies per la vostra empatia i compassió. 

Si us plau, no us rendiu. Us necessitem.